Ana Luisa Chávez Argumedo llevaba varios días en coma. Su condición ameritó que fuera intubada y que se mantuviera en terapia intensiva. En constante oración por su recuperación, su afligida familia no perdía la esperanza de que su salud, con la bendición de Dios, se reestableciera pronto.
El pasado domingo 6 de agosto, en que se conmemoró la Transfiguración del Señor, Mario Pérez, integrante del movimiento nacional de Renovación Carismática, estaba al lado de la cama de su suegra. En ese momento en Puebla se celebraba la clausura del Encuentro Nacional de Jóvenes en el Espíritu Santo (ENJES 2023), que seguía a través de las redes sociales.
Lleno de fe y con plena confianza en la misericordia de Dios, en el momento en que el padre Marcos Zavala levantaba al Santísimo para dar la bendición a los jóvenes asistentes al evento y que veían la ceremonia de manera virtual, Mario colocó su celular frente a Ana Luisa para que también fuera bendecida.
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Suenan las campanas, despierta del coma y recibe la bendición
Para sorpresa del joven integrante del Equipo Nacional de Comunicación del movimiento, en el momento en que sonaban las campanitas que indicaban que el sacerdote de la Diócesis de Mexicali otorgaría la bendición, la mujer abrió sus ojos y escuchó la bendición, mientras por sus mejillas corrían las lágrimas.
“Le puse a mi suegra el celular enfrente. Estaba el Santísimo en lo más alto para dar la bendición. Cuando se empiezan a escuchar las campanitas que anuncian que se dará la bendición, mi suegra abre los ojos, empieza a ver al Santísimo y a llorar. Yo empecé a orar por ella y le dije que tuviera fe, esperanza, que todo estaría bien”, recordó Pérez.
De manera sorprendente, la mujer que forma parte de la pastoral de Renovación de la Parroquia Esperanza de María en Ciudad Juárez, Chihuahua, no solo vio y recibió la bendición del Santísimo, sino que también escuchó las alabanzas que cantó el Ministerio de Música después, pese a la incomodidad que representaba el estar intubada.
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Dios hizo que abriera los ojos para que lo mirara
Mario Pérez indicó que Chávez Argumedo seguía consciente y despierta, viendo la clausura del evento, cuando se le acercó el doctor que la atiende y luego de verla y evaluarla, les informó que el lunes se le harían una extubación y la pasarían a piso.
Ella cree en Dios y cree en su poder sanador, indicó y por eso consideró que en el momento en que le puso las imágenes con el Santísimo ella sintió la presencia del Señor a través del medio digital y por eso despertó.
“Dios aún en este año, aun pasando casi 2024 años, sigue haciendo sus milagros, sus maravillas y seguimos viendo que Dios tiene poder. Siento que cuando le acerqué la imagen del Santísimo y dieron la bendición, hubo un poder sobrenatural donde Dios hizo que abriera los ojos y que lo mirara, que Dios en ese momento le dijo que todo iba a estar bien”, concluyó Marcos Zavala.
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