Conoce por qué se dice que las apariciones de la Virgen de Guadalupe cuando ocurre un eclipse se dice que es apocalítica ¡Aquí la explicación!
Antes de la conquista de México por Hernán Cortés, en 1521, hubo varios fenómenos naturales que, en la mentalidad colectiva de la cultura indígena, fueron interpretados como presagios de los dioses, y así fueron reportados por los primeros cronistas y las historias mexicas.
Los fenónemos naturales y su interpretación
Curiosamente, antes de las apariciones de la Virgen de Guadalupe en el Tepeyac y una década después, también hubo algunos fenómenos que fueron documentados tanto en los códices como en los escritos en lengua castellana, como fue el paso de un cometa y un eclipse, ambos, en 1531.
Los fenómenos naturales tenían gran peso en la cultura prehispánica, de modo que varios signos iconográficos no pasaron desapercibidos en la tilma de san Juan Diego, entre ellos, el hecho de que La Morenita estuviera posada sobre la luna, curiosamente oscura, y que de su cuerpo emanaran rayos tan vigorosos como los del sol.
Al estar ella posada sobre la luna, muchos indígenas pudieron haber interpretado que estaba por encima de Coyolxauhqui, la diosa luna, hermana de Huitzilopochtli, el dios de la guerra; y en cuanto los rayos solares, ella estaba delante de Tonatiuh, el sol, una de las principales deidades indígenas.
La Virgen de Guadalupe y la explicación del eclipse
En el mundo indígena, los eclipses causaban miedo en todos los pueblos pues eran interpretados como una feroz lucha entre ambas divinidades celestes, y temían que el sol perdiera la batalla y que se cumpliera la profecía teotihuacana de la muerte del quinto sol, que era el que alumbra a esta generación, como había ocurrido ya con los 4 soles que antecedieron a la actual humanidad, de acuerdo a la mitología prehispánica.
Abundan las leyendas que involucran al sol, e incluso, desde el cuarto viaje de Colón, un eclipse salvó la vida del navegante pues él lo pudo predecir ante los indígenas del Caribe, gracias a un almanaque que llevaba.
En la imagen guadalupana convergen varios elementos que los indígenas pudieron interpretar de acuerdo a su cultura, y que ayudaron a reconocerla como la madre de Jesús, el único Dios.
La Virgen de Guadalupe también concuerda con lo que dice el Apocalipsis de San Juan (12; 1):
“Apareció en el cielo una gran señal: una mujer envuelta en el sol como en un vestido, con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas en la cabeza,” por esta razón, la Virgen de Guadalupe está considerada como una imagen apocalíptica.
Fuente: desdelafe.mx