Se ha pasado de 19,4 abortos por cada 1.000 mujeres en edad reproductiva (15-44 años) en 2008 a los 14,6 abortos por millar en 2014. El incremento de leyes estatales más garantistas con la vida humana prenatal han sido clave en un periodo en el que Obama promocionó el aborto.
La causa de la vida va recuperando terreno lentamente en EEUU. Gracias a leyes de diversos Estados que son fuertmente restrictivas con el aborto. Y justo cuando estaba en el poder el abortista Obama.
Según un estudio del American Journal of Public Health entre 2008 y 2014, la tasa de aborto por cada 1.000 mujeres en edad fértil cayó un 25% en los Estados Unidos. Esta caída se ha notado de forma especial entre las más jóvenes, entre 15 y 19 años, grupo en el que la tasa ha caído un 46%.
El estudio, basado en datos del goberno federal y el Instituto Guttmacher, muestra cómo se ha pasado de 19,4 abortos por cada 1.000 mujeres en edad reproductiva (15-44 años) en 2008 a los 14,6 abortos por millar en 2014.
Resulta relevante que, según el informe, la tasa de aborto también ha descendido por primera vez en los últimos 20 años entre las capas sociales más desfavorecidas, donde hay tradicionalmente un mayor número de abortos, tal y como recoge LifeNews.com.
Es llamativo que esta caída del ratio de aborto en los Estados Unidos se haya producido precisamente en unos años en los que los gobiernos liderados por Barak Obama, apoyados por la abortista International Planned Parenthood Federation, han promocionado el aborto con todos los resortes federales.
Algunos atribuyen esta caída a un uso más efectivo de los métodos anticonceptivos. Sin embargo, el Instituto Guttmacher reconocía recientemente que las leyes estatales que han sido aprobadas en los últimos años para mejorar la protección de la vida humana están influyendo de manera decisiva en este campo.
Estas leyes han exigido un mayor nivel de información obligatoria para las mujeres que se plantean terminar con la vida de su hijo
Estas leyes han exigido un mayor nivel de información oblligatoria para las mujeres que se plantean terminar con la vida de su hijo o han realizado inspecciones sanitarias para velar por las condiciones sanitarias de los establecimientos, con lo que muchos de ellos han sido clausurados.
Al mismo tiempo, en los últimos años ha habido una fuerte presencia social del movimiento provida, que logró compromisos por parte de Donald Trump, en cuyo gabinete se encuentran personas de indubitado compromiso provida.
La muestra más evidente de ello es la presencia del vicepresidente Mike Pence en la Marcha Por La Vida que se realiza cada año en Washington, donde declaró que “la vida está ganando otra vez en América.