El comité agregó que el acceso al aborto no solo es un derecho bajo el convenio, sino que debe ser «asequible» y «efectivo», como recomendaron los grupos abortistas al comité.
A pesar de las peticiones de más de cien gobiernos y organizaciones provida, incluidos Estados Unidos y Polonia, el Comité de Derechos Humanos de la ONU excluyó a niños no nacidos del derecho a la vida en derecho internacional esta semana en Ginebra.
«Me preocupaba por un momento discutir el límite de palabras involucradas en diferencias de opinión», bromeó Yuval Shany. El profesor de derecho israelí se mofó de las preocupaciones pro-vida mientras el comité realizaba una segunda lectura de un controvertido borrador de comentario sobre el derecho a la vida, en el que quizás llegue a ser el tratado de derechos humanos más importante de la ONU.
Shany, quien estuvo a cargo del borrador durante dos años, sabía que no habría desacuerdo. Los 18 miembros del comité que registra los esfuerzos del estado para implementar el tratado de la ONU sobre derechos civiles y políticos acordaron unánimemente el texto que en algunos aspectos es más extremo que los anteriores.
Asesinato de bebes no nacido «efectivo» y «asequible» según la ONU
El comité agregó que el acceso al aborto no solo es un derecho bajo el convenio, sino que debe ser «asequible» y «efectivo», como recomendaron los grupos abortistas al comité. La profesora de derecho Sarah Cleveland dijo que esto era necesario para facilitar que las víctimas de violación obtengan abortos.
Ningún experto expresó su preocupación por los niños en el vientre materno, ni mencionó la Convención sobre los Derechos del Niño, que requiere expresamente que los estados protejan a los niños «antes del nacimiento».
«Soy muy sensible a mi conciencia», dijo Mauro Politi en un momento dado. Pero la conciencia del profesor italiano no se vio afectada por el aborto, sino que deseaba garantizar que las mujeres pudieran abortar en caso de violación, discapacidad o cuando la vida de una madre está en riesgo.
Cada estado decidirá independientemente cuando comienza la vida
«Por supuesto, hemos acordado que depende de cada estado hacer la determinación de cuándo comienza la vida», dijo la profesora alemana Anja Seibert-Fohr, el único miembro del comité que aconsejó cautela sobre la imposición del derecho al aborto, señalando el Corte Europea de Derechos Humanos como modelo.
«Los estados tienen algo de discreción», acordó Shany, «no queremos tocar el tema de los abortos tardíos».
El presidente japonés del comité, Yuji Iwasawa estaba apurado y mostró su impaciencia. Insistió en que estos temas ya habían sido discutidos, aunque no hay registros públicos de esas discusiones.
El comité apenas se inmutó cuando los Estados Unidos, Rusia, Egipto, Japón, Polonia y otros estados y organizaciones negaron que el comité tuviese autoridad para incluir el derecho al aborto en el tratado.
El tratado es un «instrumento vivo», dijo el profesor francés Olivier de Frouville. Junto con Shany, señaló cómo el comité y los órganos creados en virtud de tratados de la ONU insisten rutinariamente en el derecho al aborto.
El único inconveniente para el comité no era de los Estados soberanos sino de otra parte de la burocracia de la ONU. El comité de discapacidad de la ONU pidió que se cambie el borrador para evitar expresiones que degraden a los discapacitados. Iwasawa dijo que se reunió con el presidente del comité de discapacidades para suavizar las cosas.
Se espera que la segunda lectura continúe en marzo. El comité aún no ha abordado el tema de la eutanasia, que actualmente se considera una obligación en el borrador del comentario.