El Instituto Nacional de Desarrollo Social (INDESOL) fue creado en el 2005 con el objetivo de fomentar la participación ciudadana y la profesionalización de las organizaciones de la sociedad civil, labor que es muy importante ya que genera las condiciones para que gobierno y ciudadanía colaboren en la creación, diseño e implementación de programas y políticas públicas, dignos de una sociedad democrática madura y con visión de gobernanza.
Lamentablemente, este espacio ha sido de poco interés para el gobierno federal. La última actualización del Registro Federal de Organizaciones de la Sociedad Civil fue en 2015, cuando idealmente debería hacerse cada año. Un gobierno al que no le interesa el fortalecimiento de la sociedad civil denota practicas autoritarias.
Además, la asignación de la titularidad de esta instancia pareciera más una asignación por cuota que por la definición de un perfil con experiencia en la materia. La actual titular, Leticia Montemayor Medina, fue nombrada hace unos días, quién fuera secretaria particular del ex Secretario de Desarrollo Social.
Por si fuera poco, hace unos días, el INDESOL publicó una convocatoria en la que pretende regalar 13 millones de pesos para promover el aborto.
Estas prácticas improvisadas deben ser erradicadas. Se requieren programas bien articulados, profesionales y serios. Estamos cansados de la informalidad e improvisación con la que se toman este tipo de decisiones públicas, así, a la ligera.
Además, el gobierno federal debe dejar de promover una agenda abortista disfrazada de ser defensora de las mujeres. Qué fácil es lavarse las manos quitándole la vida a seres indefensos en lugar de asumir la responsabilidad de apoyar verdaderamente a la mujer en desamparo.
Es por eso que la sociedad civil, la que si se preocupa por el verdadero bienestar de las mujeres y de las familias mexicanas, pedimos a la señora Leticia Montemayor Medina, titular del INDESOL que derogue inmediatamente esta medida improvisada e irresponsable.
Conozco la pasión y el esfuerzo que las organizaciones verdaderas y serias ponen al servicio de las mujeres, de los niños, de los grupos vulnerados y de las familias mexicanas. También conozco las dificultades con las que tienen que lidiar todos los días para lograr su misión, pero que no son limitativas, desde esa trinchera se trabaja por un México mejor.
Estas organizaciones de la sociedad civil requieren un gobierno que no improvise, que no abandere una agenda ideológica y que sea capaz de promover una Instituto Nacional de Desarrollo Social que responda realmente a la misión para la que fue creado.
Creo que la sociedad civil y gobierno podemos, juntos, generar acciones que promuevan el bienestar y desarrollo social y humano de los mexicanos, como una sociedad madura y democrática, a la que todos debemos aspirar a ser.
Juan Antonio López Baljarg
Director de Desarrollo y Vinculación Nacional de Red Familia
@Juanlbaljarg