En Finlandia, a los padres de las adolescentes blancas y cristianas, en muchos casos con menos de 10 años de edad, no parece importarles que sus hijas posen en las redes sociales junto a inmigrantes musulmanes, que en muchos les triplican la edad.
Hemos rescatado las imágenes que aparecen en Instagram y Facebook, algunas hechas a plena luz del día. Han sido tomadas en la ciudad finlandesa de Saarijärvi y en ellas se ve a inmigrantes adultos, la mayoría de origen árabe y subsahariano, posando jactanciosamente con finlandesas adolescentes e incluso niñas. Mantienen una pose desafiante acaso porque saben que, en una sociedad tan inoculada con el virus de la liberalidad como la finlandesa, nadie les hará frente. Ni siquiera los padres. “Vuestras hijas nos pertenecen”, parece deducirse por el tenor de las arrobadas expresiones, propias de quien se sabe dueño del futuro de Finlandia. Otra ‘gesta’ que agradecerle a los desembarcantes de Normandía.
Junto a las fotos, mensajes tales como “Beautiful”, “Mi bebé” y “Te amo. Nos preguntamos por qué no han sido detenidos los adultos que aparecen en las fotos y los padres de las menores. Por lanzar unas monedas a unas mendigas rumanas en la Puerta del Sol de Madrid, los medios informativos europeos bramaron contra un grupo de aficionados holandeses del PSV. ¿Por qué sin embargo noticias tan escandalosas como ésta de Finlandia no encuentran respuestas legales ni tampoco eco en la prensa del país? Como es natural, ninguna organización feminista ni las autoridades encargadas de velar por los derechos del menor se han pronunciado sobre este asunto.
Al descubrir las insólitas imágenes, un ciudadano finlandés buscó y localizó a los padres de algunas de las menores para informarles. Lejos de inquietarse, la mayoría de los padres, al contemplar las fotos, exculparon a los adultos musulmanes. Asimismo, un medio digital finlandés estableció contacto con la familia de una de las menores. Ésta fue su respuesta: “No son más que amigos, es normal que a los chicos adultos les encante estar con chicas hermosas y las elogien. En Finlandia es un comportamiento normal”. Lo que no precisó es si a un finlandés de origen se le permitiría posar de tal guisa con alguna menor de religión musulmana.
La madre de otra de las niñas también ve “bastante normal” este tipo de relaciones con varones adultos de otras culturas. Según la web mvlehti.net, la madre trabaja en un campamento de inmigrantes y comenta que, tanto ella como su marido, “estamos tratando de enseñar a nuestros hijos a ser más tolerantes y a que acepten la multiculturalidad”.
La revelación de las fotos en internet, gracias a colectivos patrióticos locales, no ha servido sin embargo para provocar ningún tipo de alarma social en la sociedad finlandesa. Algunos incluso excusan a los adultos con el argumento de que, “después de todo, son refugiados inocentes procedentes de países violentos y desgarrados por la guerra, que no saben cómo actuar en nuestras sociedades”. Nos recuerdan a la grey del predicador Jim Jones siendo arrastrada al suicidio en Jonestown (Guyana).
Esta estrogenización moral de la progresía europea no parece que vaya a tener cura. Ni siquiera a la luz de las informaciones que hablan de crecientes casos de pedofilia entre los refugiados. Varones adolescentes están siendo violados en Calais (Francia), segun han confirmado los propios cooperantes, que ven con preocupación la falta de medidas de protección a los menores de ambos sexos en los campos de refugiados, así como los riesgos de abuso a los que se enfrentan miles de niños desplazados en todo el continente.
Médicos voluntarios que ayudan a los refugiados acampados en las afueras de la ciudad francesa revelaron a The Independent que, en los últimos seis meses, han tenido que tratar a siete niños, con edades edades comprendidas entre los 14 y los 16 años, luego de haber sido violados. Todos ellos sufrieron graves lesiones compatibles producidas por el ataque sexual.
La mayor crisis de refugiados desde la II Guerra Mundial
Entre tanto, Europa se enfrenta actualmente a la mayor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial. Suecia acogió a casi 163.000 refugiados durante el año 2015, según el servicio de migración del país. Pese a representar por el momento el 2 por ciento de la población del país, el 77 por ciento de las violaciones ocurridas en Suecia el pasado año fueron llevadas a cabo por inmigrantes musulmanes.
Y no sólo Suecia: Los refugiados han sido la causa de muchos problemas en Europa en los últimos meses: violaciones masivas en Colonia, agresiones sexuales a cooperantes en los campamentos de varios países, reyertas multitudinarias en El Pireo (Grecia), y hasta la violación en grupo de un niño de 12 años de edad, son sólo algunas casos.