La conversión al catolicismo de este matrimonio sueco ha interesado hasta en Etiopía y Kazajstán. Se trata de dos líderes pentecostales muy seguidos y reconocidos, que después de un largo proceso han decidido que su lugar era la Iglesia Católica.
Ulf Ekman es pastor luterano, fundador de Palabra de Vida (Livets Ord), un movimiento carismático con 100.000 miembros en Suecia. Fundó también una parroquia y congregaciones, en Rusia y Europa del Este, además de escuelas, periódicos y un lobby político pro vida. Eran anticatólicos hasta la visita del Papa Juan Pablo II en 1989 a su país. Allí empezó a ver las cosas de manera distinta.
Su mujer Birgitta, hija de misioneros suecos en India, y él notaron un atractivo en la fe católica que ahora han decidido dejar por escrito en español en el libro El gran descubrimiento. Nuestro viaje hacia la fe católica, de Rialp.com.
En Suecia solo una pequeña parte de sus 10 millones de habitantes asiste regularmente al culto religioso. El Papa Francisco ha sorprendido creando cardenal al obispo Anders Arborelius, que ante la conversión del matrimonio Ekman ha afirmado que “no tenían nada que ganar al hacerse católicos, todo lo contrario”. De hecho, ante este hecho hubo reacciones agresivas.
“Aquel que se convierte al catolicismo no debe hacerlo porque esté descontento con su iglesia anterior: forma parte del proceso de conversión reconciliarse con la iglesia en que uno recibió el bautismo y le dio la fe cristiana. El converso no habla mal de su iglesia anterior”, advierte el cardenal Arborelius.
“Ulf combina en su biografía secularismo sueco, luteranismo y fe carismática de estilo americano. Muchos de nosotros observamos su trayectoria desde el pentecostalismo hacia el catolicismo, en medio de la sociedad sueca, tan secularizada”, afirma Denis Searby, catedrático de griego antiguo de la Universidad de Estocolmo.
Ulf relata su camino, desde no conocer la fe hasta encontrarse con Jesucristo en 1970 gracias a que “un amigo mío se hizo cristiano de pronto, lo cual me sorprendió muchísimo”. De estos años universitarios a su éxito como líder global pentecostal se une su conocimiento de Brigitta, su paso por Jerusalén, enfermedades –la vida- y poco a poco el papel de María así como la vida de santos, como la santa Birgitta de Suecia le fueron llevando al catolicismo, minoritario en su país.
El día 21 de mayo de 2014 se incorporaron a la Iglesia Católica, pero reconocen que “emocionalmente no hubo fuegos artificiales porque no era cuestión de sentimientos”.
Desde la ciudad sueca de Upsala, este matrimonio desea que su experiencia pueda “beneficiar” a católicos y protestantes. A los protestantes les piden “mente abierta, curiosidad por la manera en que los católicos ven su fe y la Iglesia”. A los católicos les solicitan que “vean con interés” el camino de dos líderes protestantes a la Iglesia católica.
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