Diversos medios de comunicación informaron que Joe Biden ha sido el ganador de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, luego de cinco días de conteo y de una muy ajustada disputa en todo el país.
El presidente Donald Trump no ha admitido la victoria del demócrata y se ha referido a los recuentos y las medidas legales en algunos estados. Biden sería el segundo presidente católico en la historia de Estados Unidos, pero afronta serias críticas por parte de fieles y los obispos del país por su agenda política que incluye la protección legal y el uso del dinero de los contribuyentes para financiar el aborto.
Associated Press (AP), NBC, Fox News, ABC y otros medios anunciaron este sábado que Biden será el nuevo presidente luego de liderar los estados de Pensilvania y Nevada, estados que se consideraban necesarios para la reelección de Trump.
Las autoridades aún no concluyen el conteo en Pensilvania, Arizona, Nevada y Georgia, pero Biden lidera en los cuatro estados y Trump necesitaría ganar en tres de ellos para permanecer en la Casa Blanca.
Los miembros del colegio electoral emiten formalmente sus votos el 14 de diciembre, y son contados luego de manera formal el 6 de enero en la Cámara de Representantes.
Biden será el segundo católico bautizado en ser elegido presidente de Estados Unidos. El primero fue John F. Kennedy, que fue elegido en 1960 y que murió asesinado en 1963.
La senadora Kamala Harris será la primera mujer negra y de ascendencia asiática en asumir el cargo de vicepresidente. Su padre es originario de Jamaica y su madre de India.
Desde la noche de las elecciones, Trump ha denunciado fraude en las elecciones y ha dicho que con los “votos legales” él es el ganador. El sábado dijo que anunciar un vencedor es prematuro.
“Todos sabemos que Joe Biden está apurándose en mostrarse como ganador y por qué todos sus aliados mediáticos se esmeran tanto en ayudarlo: porque no quieren que se exponga la verdad”, dijo Trump en una declaración esta mañana.
“El hecho simple es que esta elección está lejos de terminar. Joe Biden no ha sido certificado como ganador en ningún estado, tampoco en ninguno de los estados altamente disputados para recuentos obligatorios, o en los estados donde nuestra campaña tiene demandas legales válidas y legítimas que podrían determinar quién vence finalmente”, agregó.
Por su parte Biden ha dicho que “ante los obstáculos sin precedentes, un número récord de estadounidenses ha votado. Probado, una vez más, que la democracia late fuerte en el corazón de Estados Unidos”.
“Con el final de la campaña, es hora de hacer la ira y la retórica dura a un lado y unirnos como nación. Es hora de que Estados Unidos se una y sane. Estamos en Estados Unidos de América y no hay nada que no podamos hacer si lo hacemos juntos”, añadió.
Los republicanos se aferran a su mayoría en el Senado y han ganado varias elecciones en la Cámara de Representantes, aunque esta seguirá con mayoría demócrata pero más pequeña que antes.
Biden se comprometió durante su campaña a revertir las prohibiciones de la ayuda extranjera a los grupos que promueven o realizan abortos, y a rescindir las protecciones de libertad religiosa de las que disfrutan los grupos que se oponen al mandato federal del mandato anticonceptivo en relación a los seguros de salud. Ambas cosas pueden hacerse por orden ejecutiva.
La campaña de Biden también se comprometió a consagrar protecciones para el aborto en la ley federal y a transmitir protecciones de identidad de género de gran alcance en la ley. Es poco probable que estas medidas se promulguen si los republicanos controlan el Senado.
Antes de las elecciones, la presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, se comprometió a abandonar la Enmienda Hyde, una prohibición de larga data de financiación federal del aborto. Queda por ver si ese esfuerzo se detendrá en la próxima ronda de proyectos de ley del presupuesto federal.
Biden apoyó la Enmienda Hyde hasta las primarias demócratas de 2019, cuando, ante la presión de otros aspirantes presidenciales, dijo que había llegado a oponerse a la medida.
La administración Trump fue ampliamente elogiada por los obispos estadounidenses por promulgar protecciones a la libertad religiosa así como medidas que restringen el aborto y el financiamiento federal de las clínicas de aborto.
Trump también obtuvo elogios entre los provida por la designación de la jueza católica Amy Coney Barrett en la Corte Suprema. Trump también se enfrentó a las críticas de los obispos por restringir el número de solicitantes de refugiados y asilo que buscan entrar en los Estados Unidos, y por su aplicación a nivel federal de la pena de muerte.
Fuente: ACI prensa