La lucha revolucionaria con base en la ideología de género es parte de la misma revolución sexual de los años 60’s que se ha mantenido y evolucionado desde entonces.
Lo mencionado en el artículo anterior La dictadura LGBT en México fue solo el principio de los alcances que tendrá el movimiento LGBT en México en más de 50 años.
El movimiento LGBT desde el principio fue buscando adeptos y buscando donde imponer su ideología.
Encontró refugio en partidos de corte socialista, considerando que estos partidos estaban al borde una crisis, no solo de manera nacional sino también internacionalmente.
Según palabras de diferentes fundadores homosexuales, estos sujetos se conformaron en al menos tres grupos importantes, con diferentes agendas, Oikabeth, Lamda y el otro el FHAR.1 El primero de una corriente lesbofeminista, previamente fue llamado Lesbos, siendo este el primer grupo de lesbianas del movimiento LGBT; el segundo una izquierda lesbiana-homosexual y más estructurada con visión más política, en cambio el tercero, el FHAR no solamente tenía visión política en el discurso, sino comenzó brigadas y manifestaciones al entonces llamado el “Negro Durazo”, eso fue más hacia los 80’s, donde dan un ligero golpe político de antisistema de izquierda.
Grupos como Oikabeth no entraban dentro de la lógica feminista de la época, de hecho, existió rechazo de parte de colectivos feministas de no lesbianas, ya que ellas solo buscaban la reivindicación de derechos civiles, como el derecho laboral e igualdad de condiciones, mientras tanto las lesbofeministas de Oikabeth buscaban la reivindicación de sus derechos sexuales y con eso la liberación sexual femenina.
En fin, el socialismo no era viable -nunca ha sido ni lo será- y así se comienzan a unirse a las filas de partidos de ideología socialista, pero esta tendencia fue a nivel global. Recordemos que mucho del Socialismo está sustentado en el ideal revolucionario, en la lucha de clases de Marx, por lo tanto, los colectivos LGBT tuvieron un espacio en estos partidos, ya que ellos mismos deseaban una revolución, una revolución sexual, donde sus “derechos” e ideología fueran la base de una nueva sociedad.
La lucha de clases marxista (3) de los colectivos LGBT, ellos eran “el proletariado” y buscaban erradicar a la “clase burguesa”, que en este caso sería la familia, porque para ellos era donde más se oprimía al ser homosexual.
Las ideas de los colectivos LGBT llevan su lucha a las fábricas, a los obreros, a los universitarios, a la academia, a los colegios, buscando adoctrinar y justificar su ideal revolucionario (sexual). En las fábricas es donde posiblemente existía o existe mucha desigualdad laboral y por lo tanto es un caldo de cultivo para los miembros LGBT. A las universidades, academia y colegios, porque es donde comienza el adoctrinamiento; las universidades es donde los jóvenes buscan un ideal, algo porque luchar el resto de sus vidas, los colectivos LGBT se aprovecharon de ese “luchar”, logrando que muchos universitarios se unieran a su lucha revolucionaria, engañados y con esperanzas muchos de ellos ahora en la academia siguen el adoctrinamiento falso del ideal “sexual revolucionario”.
Los movimientos homosexuales y lesbofeministas en México, crecieron a la sombra de la izquierda socialista, dentro o fuera de partidos como Partico Comunista Mexicano, Partido Socialista Unificado de México, Frente Democrático Nacional, PRD, entre otros.
2 1 (León, 2015) 2 “En mi cuerpo mando yo” Consigna usada por grupos lesbofeministas.
(3) Proletariado contra la clase burguesa.
Escrito por: Juan Bosco Caudillo